El clima que se vivía era de una final. Ambos equipos salieron a la cancha en busca de los tres puntos. Juvencia intentaba imponer su juego, quizás un poco acelerado, pero fiel a su estilo. Hebraica también respetaba su forma de jugar, y que tantos frutos les dio el año pasado, esperar y salir de contra.
El partido tuvo varias llegadas en poco tiempo, pero fueron los hebreos los que lograron ponerse en ventaja. Tras ese gol, Juvencia intentó llegar a la igualdad, pero la falta de puntería, el palo y la buena labor del arquero local, no encontró más que la negativa al gol. Juvencia seguía dominando las acciones, pero dos errores en el manejo de pelota (que no pueden cometerse y menos frente a un rival que sabe canalizar las contras) provocaron el 2do y 3er gol de Hebraica a menos de 12 minutos de juego, para sorpresa de la parcialidad visitante. Ahí fue cuando "Lole" Saldivar decidió pedir minuto y ordenar al equipo. Pareciera que los jugadores entendieron el concepto y manejaron mejor la pelota.
Párrafo aparte merece la acción de un jugador del equipo local, quien de la nada, y en una pelota parada aplico un golpe en el rostro de Martín Paoloroso, obviamente no observada por los árbitros. Como si eso no hubiese alcanzado comenzó a gesticular a la hinchada verde marcando que Hebraica ganaba 3 a 0. Pero… nunca hay que cantar victoria antes de tiempo. Eso no hizo más que enfurecer a la gente del “verde”, y que esta comenzara a alentar, cosa que el 9 de Hebraica demostró no estar capacitado a aguantar, porque de allí en más solo cometió errores y perjudico a su equipo jugando más con la hinchada que contra los jugadores verdes.
Así fue como mediante un tiro de media distancia al ras de suelo de Luciano López, Juvencia logró descontar y meterse de nuevo en el partido. Los Gladiadores seguían atacando y el segundo gol no tardo en llegar, tras una gran jugada de fantasía de Kevin y un poco de fortuna. El partido seguía vibrante e iba levantando la temperatura. Pero en el mejor momento de Juvencia, el equipo local se encontró con una sexta falta. Su arquero se encargo de ejecutarlo, pero la pelota salió desviada. Juvencia siguió insistiendo, así fue como se encontró con una sexta falta. El encargado de empatar era Nacho Fiorini, y no iba a perdonar, poniendo el empate transitorio.
Juvencia volvió a cometer otra sexta falta, esta vez fue “el loco” Vega el encargado de detener el remate y darle el empujón anímico al equipo para ir en busca del 4to gol. Y así fue como tras una jugada colectiva, Sergio “el capi” Carabajal conectó un pase al segundo palo.
Difícil era de creer que ante un rival como Hebraica se remonte un 0-3 en 5 minutos de reloj. Pero así son "Los Gladiadores Verdes". Nunca hay que darlos por muertos… y menos tocarle el orgullo.
El partido 4 a 3 a favor de la visita y se llegaba al descanso.
Arrancaba el segundo tiempo y Juvencia mantenía la pelota, mientras que su rival seguía defendiendo. Al no encontrar resultado los locales decidieron ejercer la marca más adelantados. Pero ante la presión hebrea en mitad de cancha, Sergio convino una pared con Lucho, que con un pase exquisito, lo dejó solo para que el “Capi” busque la llegada por el segundo palo de algún compañero, y Kevin no iba a fallar. Poniendo las cosas 5-3. Al poco tiempo Hebraica logró descontar con una excelente definición de emboquillada por sobre el arquero visitante.
Cuando se venían minutos difíciles apareció Martín Paoloroso, al robar una pelota, salir de contra y tras apilar a 2 jugadores rivales sacó un zapatazo fuerte y alto que dejó sin reacción al arquero y estableció el definitivo 6 a 4.
Ahí, Hebraica, necesitado salió a buscar el partido, con gran cantidad de tiros de media distancia, que se iban desviados, y cuando lograban encontrar los 3 palos se topaban con la sólida respuesta del “loco” Vega. Los minutos pasaban, hasta que en una jugada confusa "Fiorini" se enreda con un jugador rival y el árbitro (de pésima actuación) decide expulsar a ambos jugadores, para sorpresa de ambos equipos. Hebraica colocó a su arquero como un jugador de campo mas y fue en busca del gol. Al minuto de la expulsión de “Fiorini” llegaría la de “Pucheta”, dejando a Juvencia con 3 hombres en cancha. Pero el coraje, la marca, el buen rendimiento físico y una vez más las manos del “loco” vega impedían el descuento. Fueron dos minutos de entrega total por parte de Vega, Lucho y Sergio, que defendieron con mucho sacrificio el arco de Juvencia. Al ingresar los restantes jugadores por bando, la historia no se modificó y se terminó de cerrar el partido con un gran festejo final de los jugadores visitantes junto a su público fiel.
Se ganó un partido muy importante para engrosar el promedio, se ganó ante un rival difícil, se ganó frente un rival directo en la pelea por la permanencia, se ganó remontando un resultado demasiado adverso. En síntesis, SE GANÓ.
Quedan muchísimas cosas por corregir y muchos partidos complicados, pero con esas ganas, con estos jugadores y esta hinchada, Juvencia va a dar pelea en la máxima categoría del futsal argentino.
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